Entrevista a Julio Basulto

Próximamente participará en el XII Congreso FEDALMA de Lactancia Materna. A su cargo estará la Conferencia:  «Que no te confundan: la alimentación de la mujer que amamanta no es un jeroglífico».

El evento tendrá lugar en Alboraya (Valencia) los próximos días 17 y 18 de abril.

El Grupo Anfitrión del Congreso Mammalia nos ha hecho llegar esta entrevista y hemos querido compartirla. Esperamos que os parezca interesante.

Julio Basulto es Diestista-Nutricionista. Docente en diferentes instituciones, como la Universidad de Barcelona, es miembro de diferentes Grupos, Paneles, Sociedades o Comités de Expertos y  colaborador habitual en diversos medios, como las revistas «Tu bebé» o «ser Padres».

Es coautor de los libros No más dieta, Secretos de la gente sana y Comer y Correr. También es autor del libro Se me hace bola, además de ser autor o coautor de diferentes publicaciones.

Y, sobre todo, papá de tres preciosidades: María, Ana y Clara.

“Aunque hay grandes intereses para convencernos de lo contrario, ni el embarazo, ni el nacimiento del bebé, ni la lactancia son una enfermedad”.

Entrevista a Julio Basulto:

Actualmente, ¿qué formación en lactancia materna reciben en España los dietistas-nutricionistas? ¿Te parece suficiente y adecuada?

La formación en lactancia materna se aborda, o bien como parte de asignaturas troncales (Ej.: “Nutrición Básica”, “Nutrición y Dietética”, “Salud Pública”, o “Nutrición Comunitaria y Epidemiología Nutricional”), o bien en una asignatura optativa centrada en la alimentación en la infancia. En mi opinión, dicha formación es insuficiente e inadecuada, aunque es muy superior a la que reciben muchos otros profesionales sanitarios, y eso incluye pediatras o enfermeros.

Como sabéis, la Organización Mundial de la Salud (OMS) y la UNICEF trabajaron durante toda una década un programa mundial de protección, promoción y apoyo de la lactancia materna denominado «Iniciativa Hospital Amigo de la Madre y del Niño», que detalló los “Diez pasos hacia una lactancia feliz”. Pues bien, el segundo “paso” hace una alusión clara a la formación. Leemos que se debe “Capacitar a todo el personal de salud de forma que esté en condiciones de poner en práctica esa política”. La política a la que hacen referencia no es otra que disponer de escritos consensuados, y expuestos de forma visible en todas las zonas del hospital donde se atiende a las madres y a los niños, para que lo lea todo el mundo… incluyendo el personal sanitario. La palabra “capacitar” es importante, porque presupone que el personal no está, en general, bien formado.

Con respecto a esta cuestión, me gusta mucho la reflexión que incluyó la Dra. María José Lozano de la Torre en el capítulo “Los Diez Pasos de la OMS y UNICEF para favorecer la lactancia materna. Aplicación y evidencia científica de su eficacia”, que escribió en el libro “Lactancia Materna: guía para profesionales”, editado por el Comité de Lactancia Materna de la Asociación Española de Pediatría. Transcribo un fragmento, porque me parece que transmite exquisitamente lo que pensamos todos los que nos preocupamos por la lactancia materna:

“No se puede esperar que los profesionales sanitarios que no han recibido formación en la lactancia puedan ofrecer a las madres orientación eficaz y asesoramiento competente. Todo el personal con responsabilidad en el cuidado de las mujeres lactantes debe recibir formación que permita aumentar los conocimientos pero también las habilidades, o no será posible aplicar la teoría a la práctica. Es preciso también cambiar las actitudes que con frecuencia constituyen un obstáculo para la promoción de la lactancia. Entre dichas actitudes podemos señalar, por ejemplo, la presunción de que los profesionales sanitarios ya lo saben todo”.

¿La madre lactante escucha con frecuencia falsos mitos en relación a la lactancia materna en las consultas de los dietistas-nutricionistas?

No sé si con más frecuencia que en otras consultas… pero seguro que escucha tales falsos mitos. Es importante matizar que en muchos casos el paciente cree estar delante de un dietista-nutricionista (que no es otra cosa que un titulado universitario en una carrera denominada “Nutrición Humana y Dietética”) pero en realidad está frente a un autodenominado “experto en nutrición” sin titulación alguna, o con una titulación no reconocida como profesión sanitaria. Lo que se conoce como “intrusismo laboral”, vamos. En todo caso, uno de los motivos que aviva la existencia de falsos mitos es el desconocimiento generalizado que existe en nuestra sociedad en relación a la lactancia materna. Tanto es así, que un estudio que evaluó la información contenida en libros especializados de obstetricia y ginecología, concluyó que tales libros contienen a menudo “omisiones y/o inexactitudes significativas”. El estudio se puede consultar en la edición de febrero de 2011 de la (recomendable) revista “Journal of Human Lactation” (www.pubmed.gov/20871091). Y ya que hablo de estudios, y de lactancia materna, me parece interesante citar un trabajo más: el aparecido en julio de 2013 en otra revista que vale la pena, denominada “Breastfeeding Reviews”. En él leemos que muchos de los libros utilizados en las universidades de farmacia “presentan importantes lagunas en su cobertura del uso de los medicamentos en la lactancia materna” (www.pubmed.gov/23957179). Aunque ninguno de los dos estudios se ha llevado a cabo en España, sus resultados son del todo extrapolables a lo que sucede hoy por hoy en nuestro país.

¿Cuáles consideras que son los organismos de referencia ahora mismo en cuanto a alimentación de niños y madres lactantes?

Creo que lo ideal es consultar diferentes fuentes (fiables) para hacernos una idea más real de lo relacionado con todo lo relacionado con la nutrición humana. Antes de citar algunas de ellas, permitidme que recomiende los libros “Mi niño no me come” y “Un regalo para toda la vida” del pediatra Carlos González. Son magníficos y una fuente más que “potable” de información fidedigna. Las fuentes que yo suelo consultar (sus páginas web, sus libros o los documentos que publican de forma periódica) son:

– Academia Americana de Nutrición y Dietética
– Academia Americana de Pediatría
– Academy of Breastfeeding Medicine
– Agencia Francesa de Seguridad Alimentaria, Medioambiental y Salud Ocupacional
– Asociación Británica de Dietética
– Asociación Española de Pediatría de Atención Primaria
– Asociación Francesa de Dietistas y Nutricionistas.
– Comisión Europea
– Comité de Lactancia Materna de la Asociación Española de Pediatría
– Instituto de Medicina de Estados Unidos
– Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad
– NHS Choices
– Organización Mundial de la Salud
– Revista Española de Nutrición Humana y Dietética
– Web “e-lactancia” (www.e-lactancia.org)
– Web “Lactmed” (http://toxnet.nlm.nih.gov/newtoxnet/lactmed.htm)

Sea como fuere, cuando existen problemas relacionados con la alimentación debemos acudir a un dietista-nutricionista, a un médico o a los dos a la vez. Si no nos fiamos de su criterio, debemos cambiar de profesional sanitario, pero no confiar en los llamados “terapeutas alternativos”.

¿Nos podrías dar unas pautas básicas en la alimentación de la mujer durante el embarazo?

Creo que todos los consejos podrían resumirse en “huya de un mal patrón de alimentación durante todo el embarazo”. Se deben evitar todas las bebidas alcohólicas, lo que incluye a la cerveza o al vino. No hay un nivel seguro de consumo de alcohol, es decir, exento de riesgos para el feto. Aunque no es un aspecto exactamente “dietético”, debo mencionar al tabaquismo, porque es el factor aislado más importante de enfermedad y muerte en madres e hijos: conviene que las embarazadas fumadoras (o sus parejas -el tabaquismo pasivo daña a la madre y al feto-) acudan a un especialista para que les ayude a dejar de fumar lo antes posible. El profesional sanitario que atienda a la mujer, posiblemente le pautará un suplemento de ácido fólico, además de revisar tanto el estado de salud de la madre (o los fármacos que pueda estar tomando), como sus antecedentes personales y familiares. Ello contribuirá a que el embarazo siga su curso con éxito. Como existe un alto riesgo de que nos “encolomen” un “superalimento”, un complemento alimenticio “mágico” o una misteriosa sustancia con supuestas propiedades nutritivas, preventivas o terapéuticas, conviene tener activado el “escepticismo extremo”.

¿Existen pautas para alimentación de la madre lactante?

Es mucho más crucial acudir a un grupo de apoyo a la lactancia materna que preocuparse de seguir unas pautas nutricionales concretas. Sé que la nutrición es importante en todas las etapas de la vida, y eso incluye la lactancia, pero hoy por hoy buena parte de los mensajes que reciben las mujeres lactantes en relación a la nutrición provienen de entidades más preocupadas por vender sus productos (leches artificiales, alimentos “funcionales”, suplementos vitamínicos, complementos alimenticios, plantas “medicinales», etc.) que por la salud maternoinfantil. Tales entidades se encargan de hacernos creer que la alimentación de la madre que amamanta es de capital importancia para la producción de leche, cuando no es así. Es lo que se conoce como “mensajes disuasorios”. Es decir, transmiten la errónea idea de que si las madres no son el súmmum de la perfección, no pondrán producir leche suficiente o de buena calidad. Lo hacen para que acaben siendo fieles consumidoras de sus productos. Conviene que la mujer siga una dieta sana en la lactancia, pero no para producir litros y litros de leche materna con propiedades sobrenaturales, sino para preparar el cuerpo para siguientes embarazos, proteger su propia salud y, sobre todo, dar ejemplo.

Si la dieta de una madre lactante es inadecuada, ¿es preferible para su hijo ser alimentado mediante leche artificial?

Ni en sueños. Leamos qué opina el Comité de Lactancia Materna de la Asociación Española de Pediatría (AEPED): “El estado nutricional de la madre, salvo en casos de desnutrición extrema, no interfiere en la capacidad de producción láctea ni en la calidad de la leche materna”. Es más, cuando existe desnutrición extrema lo que tenemos que hacer es dar leche de vaca… a las madres, para que mejoren su estado nutricional, pero no al bebé, que debería seguir tomando la leche de su mamá.

¿En qué medida las empresas fabricantes y distribuidoras de leche artificial pretenden convencernos de que solo mediante un «estilo de vida saludable» la leche materna puede ser superior a la artificial?

En “muchísima medida”. Nos dirán, por ejemplo, que tenemos que beber “un mínimo de 1,5 litros de agua”, que no nos saltemos ninguna comida, que tomemos infusiones para “aumentar la producción de leche” (sic), que evitemos el café o el té, que sigamos una docena de consejos dietéticos, que la mayoría de los medicamentos son incompatibles con la lactancia, que no nos olvidemos de descansar “las 8 horas” y que evitemos los celos de papá (acompañarán el consejo de un papá con su hijo en brazos, dando el biberón al pequeño). En resumen, que nuestra vida sea un perfecto equilibrio de fuerzas, un yin-yang cósmico. No son más que mentiras camufladas de consejos bienintencionados, con el propósito soterrado de que enchufemos un biberón a nuestro hijo, ya que “los avances científicos han conseguido que las fórmulas artificiales se asemejen cada vez más a la materna”. La frase entrecomillada es real (y falsa). La detallé, como sabéis, en el texto “¿Desventajas de la lactancia materna? ¡Hasta ahí podíamos llegar!”: http://comeronocomer.es/mitos-para-toda-una-vida-bebes/desventajas-de-la-lactancia-materna-hasta-ahi-podiamos-llegar

¿Qué crees que aportará tu conferencia al Congreso «Lactancia materna: ser mamíferos hoy»?

Se atribuye a Sócrates una frase que dice “La ciencia humana consiste más en destruir errores que en descubrir verdades”. Pues bien, mi aportación intentará, precisamente, destruir errores, una tarea que no es en absoluto fácil o gratificante. Esto me recuerda a otra frase de una amiga llamada Mar Alegre, socia fundadora de Mammalia, y que además es organizadora de vuestro (genial) Congreso: “Cuanto más obvias son las cosas, más palabras necesitan para que el mundo las vea”. Me la escribió en un correo electrónico, y yo la archivé como oro en paño. Porque eso sucede hoy con la lactancia materna. Pese a que es obvio que dar el pecho es la manera normal y natural de alimentar a un bebé, son precisas muchas palabras para que la mayoría de la población comprenda que no tiene misterio alguno. Sea como fuere, lo que pretendo con mi trabajo es aportar herramientas para que la población tenga libertad de elección. Una libertad que solo se consigue cuando disponemos de información rigurosa y no manipulada.

Tu nuevo libro se publica el próximo mes de marzo, poco antes del congreso. ¿Qué nos puedes contar de él?

Pues sí, sale a la venta el 5 de marzo de 2015. Puedo contaros, encantado, que se titulará “Mamá come sano”, que su subtítulo es “Alimentación saludable en el embarazo y la lactancia”, y que estoy muy contento (y agradecido) de que el prólogo corra a cargo del pediatra Carlos González y que el epílogo lo haya hecho la presentadora y humorista Eva Hache. Y puedo, ya puestos, transcribiros un fragmento. Ahí va: “Aunque hay grandes intereses para convencernos de lo contrario, ni el embarazo, ni el nacimiento del bebé, ni la lactancia son una enfermedad. Por desgracia, lo consiguen en no pocas ocasiones, lo que genera no solo multitud de mujeres sobremedicadas, también multitud de mujeres sobrepreocupadas”.

Un abrazo, mil gracias por invitarme a vuestro Congreso, por esta entrevista, y sobre todo por vuestra impagable labor

 

Mas información sobre Julio Basulto es su web: http://www.juliobasulto.com/

Más Información sobre el XII Congreso FEDALMA 2015 en: http://fedalma.org/congreso.php